Muchas veces la falta de conocimiento nos lleva a crear negocios que nos esclavizan, en vez de crear negocios que trabajen para nosotros. Pero… ¿no es lo mismo un negocio que una empresa? No lo es; una empresa es un negocio, eso es cierto. Pero para que un negocio sea una empresa debe cumplir con algo importante, generar ingresos mes a mes de forma constante independientemente de que estés trabajando o no.

Antes de entrar en detalles de diferencias es necesario definir autoempleo y emprendimiento para entender un poco mejor.

El autoempleo consiste en crear el propio puesto de trabajo; a través de una actividad que por necesidad o oportunidad decidimos comenzar a realizar, ya que generará determinadas ganancias. Depende de nosotros y no excede la función de uno mismo.

Por su parte, el emprendimiento es un autoempleo que ya ha evolucionado o expandido; involucra a personas que detectan o identifican oportunidades de negocios y que venciendo obstáculos y precariedades obtienen los recursos pertinentes, ponen en operación proyectos de negocios por iniciativas propias y aprenden mediante la práctica superando las dificultades, ganándose un posicionamiento.

A continuación algunas diferencias:

  • En el autoempleo se tiene un salario por el trabajo realizado. En cambio en el emprendimiento se obtiene una rentabilidad por la inversión que se ha realizado.
  • El autoempleado realiza el trabajo de manera continua o mecánica, mientras que para un emprendedor la actividad es creativa, de aportar ideas, adaptarse y dar soluciones.
  • El autoempleado repite lo mismo que hacía en su trabajo asalariado: ocupa su tiempo aplicando sus conocimientos técnicos. El emprendedor se concentra en la visión macro, enfocado en cada área del negocio que desea emprender.
  • Un autoempleado trabaja para lograr objetivos diarios, mientras que el emprendedor lo hace para lograr metas planificadas.
  • Con el autoempleo la persona es esclava de su trabajo, si no actúa no recibe dinero. Por su parte, el emprendimiento permite que a largo plazo el emprendedor pueda recibir ganancias sin que deba trabajar.
  • El autoempleado no necesita más formación, ya que su trabajo como está funciona perfectamente. En cambio el emprendedor se encuentra en formación continua para así poder dar respuesta y adaptarse a las tendencias.
  • En el emprendimiento se establecen roles profesionales ligados a los conocimientos y habilidades, mientras que en el auto empleo no.

El autoempleo y el emprendimiento adquieren especial relevancia en la búsqueda de alternativas que nos lleven a iniciar esa idea de negocio

Muchas veces tendemos a confundirnos con ambos, pero al pasar el tiempo se vuelve notoria la diferencia entre cada uno… Llegar a convertirse en empresario es solo un paso más que se irá realizando dependiendo del crecimiento del autoempleado.

Hacer de la necesidad una virtud siempre será un punto a favor de cualquier emprendedor.

¿Y tú, te consideras emprendedor? ¿Tienes una idea que quieres llevar a cabo?

Si tu deseo es emprender te recomiendo hacerlo con profesionales, ¡no te expongas!