Conoce las neuroventas: una nueva forma de vender más
Si buscas cómo destacarte como vendedor o aumentar los niveles de ventas de tu negocio, hoy te presentamos algunos consejos muy útiles. Las neuroventas son la manera más eficaz de promocionar un producto. ¿Por qué? Sabemos que comprar o adquirir algo es una decisión, y si somos capaces de comprender cómo se comporta el cerebro al tomar decisiones, llevaremos una gran ventaja. No estaremos negociando con la persona, sino directamente con su cerebro, que es quien realmente decide si compra o no.
Los fundamentos de esta novedosa práctica de mercadeo provienen de estudios realizados por instituciones y organizaciones especializadas en neurociencias. Pero, ¿qué son las neurociencias? En resumen, son disciplinas orientadas a entender el comportamiento del cerebro y del sistema nervioso. La farmacología y la bioquímica son algunos ejemplos.
En este boom tecnológico en el que vivimos, la ciencia ha dado su opinión en casi todos los campos imaginables, incluso en aquellos que no imaginaríamos. Ya no hay límites en los estudios; el fin es comprender de una vez por todas cómo funcionamos.
En aras de mejorar las estrategias de ventas y marketing, los especialistas se esfuerzan por innovar, ¡y han dado con grandes hallazgos! Aquí te dejo algunos tips que te servirán.
No vendas, relacionate
Si lo que quieres es vender, debes dejar atrás el estereotipo del vendedor que solo ocupa un puesto en la empresa para cobrar y entregar. Todo evoluciona, y los clientes no son la excepción. Ahora los consumidores son más exigentes, tienen muchas más opciones cuando compran algo. Dudan más, son más indecisos.
Está en tus manos saber persuadirlos para convencerlos. Para ello, no te propongas solo vender, sino también relacionarte. Ve en tu cliente a un potencial amigo.
Invítalo a un parque tranquilo o a un café, comparte una comida. Disimula que es una reunión de negocios para disminuir la tensión y las expectativas. No hablen solo de presupuestos y gastos; hablen de deportes, cuenten chistes, mencionen a sus familias. De esta manera, crearás un lazo que afectará la decisión de tu cliente.
No solo digas, haz preguntas
En lugar de explicar demasiado y enfocarte en detallar la oferta o el servicio, haz que el consumidor participe en la venta respondiendo a preguntas sugestivas. Así, es más probable que termines vendiendo. Escucha más y habla menos. El vendedor común comete el error de atacar al cliente mostrándole cuán bueno es el producto sin escuchar lo que realmente necesita.
Nos encontramos con clientes que no hablan mucho. En esos casos, convierte tus afirmaciones en preguntas. ¿Cómo? En lugar de decir “Hoy es un día muy lindo para ir a la playa”, pregunta “¿No te parece que hoy es un día muy lindo para ir a la playa?”. Así, el cliente tendrá que responder, haciéndolo parte de la conversación.
No vendas a consumidores, vende a conocidos
Como te hemos dicho, debes crear confianza entre tú y el cliente. No hables con formalismos excesivos, pero tampoco te pases de la raya. El cliente no quiere escuchar lo bien que puedes hablar, sino recibir el servicio que necesita.
Es importante que utilices el “tú”. Una vez haya confianza, usa el tuteo. Dirigir el mensaje con “tú” capta la atención del cliente. Estudios han demostrado que el cerebro humano reacciona más rápido cuando escucha una propuesta directa. Llamar al cliente por su nombre también activa su percepción y lo hace sentir especial.
No vendas con palabras, vende con tu cuerpo
Según el neuromarketing, el lenguaje verbal solo influye en un 17% en la venta. Contrario a esto, el lenguaje corporal influye en un 55%. Los gestos dicen más que las palabras. Muévete, usa las manos y objetos para representar lo que dices y captar la atención del cliente.
Cuenta historias, no ofertas
Las historias enganchan a las personas. Un ejemplo es el éxito de las telenovelas, donde todo el mundo comenta el capítulo anterior. La curiosidad de saber cómo termina un relato aumenta las expectativas. Al promocionar algo, intenta relacionarlo con una experiencia personal o de algún conocido. Verás cómo el consumidor se interesa más.
Vende tres, no dos
El número tres es muy atractivo para el cerebro. Estudios han demostrado que, aunque la promoción ofrezca más productos, las personas tienden a escoger los tríos. Al presentar tu producto, utiliza tres ejemplos. Esto hará tu oferta más atractiva de manera inexplicable.
No crees promociones, crea experiencias
Permite al cliente interactuar con lo que le vendes. Deja que compruebe la calidad de lo que ofreces. Si, por ejemplo, eres repostera y buscas socios, envía muestras de tus mejores recetas antes de presentarte en persona. Convéncelos a punta de sabor, no de palabras.
Espero que estos tips sobre neuroventas te sean de ayuda. Recuerda que el éxito de tu emprendimiento está en tus manos. Toma coraje y atrévete a innovar. Lo nuevo siempre atrae, mantén eso presente. Gana clientes y asegura la estabilidad de tus sueños.